DEE DEE Y SUS SUEÑOS AFILADOS (RATED "R")

Camina desnuda sobre esta dudosa alfombra Persa, acariciando rosada de pies el suelo. Cierra la puerta del baño, y frente al espejo, revisa su cuerpo agotado. Por segundos la situacion la hizo sentirse extraña, recordarlo colgado de su cuerpo y dejando huellas, la hacen darse cuenta que lo estuvo, queriendo fuerte. Entonces el rostro le cambia. Era de ella tener una sonrisa a "Flor de labios" labios gruesos, bordes carnosos de garganta, de labios que se miran en aquel reflejo espejo recorriendo el sexo erguido de Ludovic, labios que junto a su lengua marcaban la ruta perfecta para un placer nada egoísta.
Necesitaba sentirlo duro, sentirlo grande, tenia sed y bebía lo que quería. Lo tomaba con la derecha, mientras lo acariciaba con la izquierda, masturbando. Recorría sus pectorales asumiendo su labor con delicia. Un gusto agridulce casi sin presencia, así lo recuerda. Mordiendo de vez en cuando, comprobando la densidad, que ella necesitaba, iba envolviendose sobre su glande arrojando salivas en llamas. Ludovic le toma la cabeza, la sujeta de los cabellos, su "Performance" lo dejaba sin ideas, y aferrándola hacia él, le quería hacer notar lo buena, lo complaciente y mamona que era. Abríendo sus piernas lograba una erección mayor, ver como su pene se perdía a medias dentro de esa boca sin pintar excitaba. Ludovic distraía su mente jugueteando con su clítoris hermoso, un rosado extremo que hacia agua.
La toma de las piernas, arrastrándolas hasta su mentón, mientras ella adivinandolo se dejaba arrastrar, descansando su cuerpo sobre Ludovic, colocando su dulce entre pierna y púbicos vellos convertidos en cojinetes sobre su boca, sin dejar por supuesto, de estrangular el miembro erecto de su amigo con la boca, miembro que ya pronto tendría entre sus piernas. Sabor dulce, y un manjar buque de aromas, desproporcionado y entre salivas. Acaricia con su lengua aquella vagina húmeda, recorriendola cual oleo, a pincel, extrayendo sus propios dedos en el inexistente bosque interior, raspando paredes, tratando de arrancar en cada orificio un mar de pasiones, buscando suspiros, queriendo oír quejidos, unos gritos mas, solo algunos mas, y sentir que jamás lo olvidaran, que lograra hacerla quedar, y raspar caderas en la madrugada.
-¿Qué tengo? -Se sigue mirando en aquel espejo que reflejaba su figura esbelta, ahora observaba unas machas pequeñas alrededor de su pecho, tomo algo de papel para limpiar sus limones.
El había tomado sus pezones como suyos, probo sabroso y exquisito, besando con calma apasionada, metiendolos dentro de su boca, paseando su lengua de lado a lado, acariciando a rastras con la lengua. Aun sus dedos seguían jugueteando dentro de su entre pierna, Dee Dee solo atinaba a desgarrarle los muslos, gimiendo ruidos, que sintiera "tanto, tanto mi querido". (Ahora recuerda que esas manchas que tenía impregnadas en su pecho, no eran de besos). Ludovic sintió como aquellos pezones lindos, hermosos, luego acariciaban su glande; grueso, y palpitante, y como un amago de semen la recorrió, para marcarla por siempre.
Dee Dee siente un cosquilleo que baja por su espalda, una rafaga que no llegaba a ser molestia, o dolor, quemaba. Voltea su torso para revisar sus caderas y mira aquella grupa mágica, se olvida de todo y se maravilla sola "Que bello y perfecto", ¿Porque Ludovic trato de penetrar allí sin permiso?, ya lo había aprobado su paladar, incluso las palmas de su mano, mientras azotaban con firmeza haciendo de su mano un látigo de caer ceñido sobre esos glúteos golosos, disfrutando el sabor gustoso que segregaba, su pene dentro de aquella vagina ahora también "Flor de labio".
Ella de pies y manos sobre la cama, él de rodillas tomando sus caderas, expandiendo sus manos por su espalda, bordeando hombros, tragando nucas, juntándola con ritmo hacia su vientre, una, otra, otra, una y mil veces mas, con violencia, con deseo, con sexo, con ganas, después con amor, con caricias, con besos, luego todo; al mismo tiempo. Penetra de forma recta, con una rodilla en la cama y la otra colgada en el suelo sobre el filo de la cama, sujetando su torso, acariciando pechos, sintiendo su espalda revolcándose sobre él.
Pensó en tomar una ducha, refrescarse algo, el ambiente aun esta, extremadamente caliente, y sentir tantas cosas así de nuevas la asustaba. Sus pies todavía en líquidos, algo aceitosos, por lo Ludovic vertió en su carne mientras la iba rodeando con sus manos, aceite de brillo fino que puso su piel transparente y la volvió aun mas mágica, mas deseosa. Aun se mira en el espejo, feliz, reposada, sensual, deseada, se siente extraña y teme haber perdido. Ludovic entra al baño, la busca reflejadonse mágico en el espejo, la toma de la cintura, la besa, le dice "Suprema, dulce y encantadoramente maravillosa" sus sinónimos para volver a la cama, no se atreve a decirle "Lo haces única" y que le encantaría que volvieran algunos párrafo atrás.
Ella trata en sus ojo de leer su mente, "Useless", acaricia su miembro mirándole fijamente, lo lleva entonces hasta la cama, se acarician, se tocan, hablan, ríen. Erecto y sin nada, Dee dee se acomoda sobre él, introduce su sexo; duro, ancho, erguido, ella lo toma, apretando, dándole entrada entre sus labios goteantes, contoneando su cuerpo, arriba, abajo; con fuerza, alzando su hermoso culo, golpeando con violencia de nalgas, excitándose rápido; "La desmesura". Muerden sus pechos; ella desgarra sus pectorales, el lame sus pezones. Otra vez aquel ardor en su vagina, arde, le gusta, algo se apodera de ella, gime con fuerza, no puede cerrar su boca, sus palabras suena tan verdaderas, que hacen creer que todo es sincero, y para después el usara "Eterno". ¿Como reaccionar?, ella refriega su sexo, ya el calor ha subido, dominando su rostro; un bochorno, un sentimiento que parte desde su garganta hasta su sexo, sus piernas, su pecho sus nalgas, todo sentimiento, Ludovic penetra, busca descanso entre sus piernas, ella zafa se agacha para agitarlo con fuerza, lo acaricia, lo besa, lo llena de labios, de lengua, de bocas, transportando vida, estrellando mejillas, el resultado; un chorro de placer que termino por extenderse hasta su rostro, hasta sus pezones y que él hiciera llega hasta su grupa, su entre pierna, hasta penetrarla de nuevo dejándole algo de semen dentro, para que sintiera como estaba hirviendo. Abrazados, sucios y agitados se prometieron en silencio jamás hablar de aquello, jamás, mencionar que vivieron enamorados un momento.
Ludovic la besa tiernamente, le dice que vuelve enseguida, aun no le dice que es fantástica, que hacer el amor con ella es realmente hacer el amor y con mucho sexo, o tal vez si se lo diría pero primero va al baño, siente ganas de mirarse al espejo, decirse así mismo, que esto ya dejo de ser un mal sueño, que en verdad, esta pasando.